martes, marzo 20, 2012
cámara 35 mm
Timo retrató a Ari en febrero de 2010. Una semana vivió con nosotros en ciudadela Zapote, en la número 65, que es su casa, y ya de vuelta en su otra casa, en Berlín, escribió esto.
De Zapote al Cielo
Una de esas casas de chapa y madera
que en otra época otro Estado puso
o ayudó a poner, con ese rectánculo
medido del jardín, la mesa, las sillas
el cenicero descartable, ya nadie dice fumador,
somos padres y librecontratistas
y el último trago me convidan antes
de las doce en el bar de la esquina.
Uno de esos livings que se mantienen oscuros
y enrejados el día entero con su sofacama
en la que se duerme hasta que el chorro
de la ducha anima las niñas, y parada
en la silla, la más grande, baila el baile
de la fruta vaciando un plato de mango y ananá
y si desviara por un momento la vista vería
un picaflor que asciende de Zapote al cielo
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1 comentario:
la foto, bella. buen poema también...
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